Moisés Aylas. maylas@editoraperu.com.pe
Informe. Gracias a la dinámica de una diversidad de actividades, Arequipa está creciendo a pasos agigantados y se ha convertido en una región de oportunidades. Además de atraer inversiones, esa expansión representa nuevos desafíos que deben ser atendidos, para alcanzar una mayor inclusión social y competitividad.
Como cada domingo, André se despide de su madre, hermanas y tíos. Va rumbo al aeropuerto para abordar el avión que lo llevará a Arequipa. Desde hace poco más de seis meses su vida la comparte entre Lima y la Ciudad Blanca. Es una nueva experiencia, pues nunca antes estuvo tanto tiempo alejado de su familia, pero ahora disfruta de este trajín: tres semanas trabaja en una minera en la región sureña y la cuarta la pasa con sus seres queridos.
Él es un joven ingeniero industrial graduado en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, una especialidad que tiene gran demanda por la falta de profesionales capacitados. Los pocos que hay son los más requeridos por las empresas.
La historia de André es como la de otros jóvenes profesionales de Lima que no han dudado en salir de la capital para forjarse un futuro y ser los actores principales de ese importante despegue económico que se vive en las regiones, como es el caso de Arequipa, que se ha convertido en el epicentro del pujante crecimiento del interior del país y, en especial, del sur.
Oportunidades
“Arequipa está creciendo gracias al dinamismo de una diversidad de actividades”, afirmó el jefe de la sucursal arequipeña del Banco Central de Reserva (BCR), Raúl Castro, tras sostener que se ha constituido en un importante polo de desarrollo en la Macrorregión Sur, que atrae inversión, oportunidades de negocios, inmigración y nuevos retos.
Refirió que el índice de empleo regional registra un continuo crecimiento desde 2003, y citó los resultados de la Encuesta Nacional de Variación del Empleo, que efectúa el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo: “El índice de empleo en empresas privadas formales de 10 a más trabajadores en la ciudad de Arequipa creció a un ritmo promedio anual de 5.8% entre 2003 y 2013”, manifestó al Diario Oficial El Peruano.
De acuerdo a un estudio de Arellano Marketing, la clase media en la provincia de Arequipa comprende a no menos del 60% de la población. ¿Qué influyó en este crecimiento? El surgimiento de nuevas oportunidades de empleo y de negocios para los trabajadores independientes, el aumento en los ingresos familiares, una mejor preparación y capacitación de los trabajadores, un mayor acceso al crédito, entre otros factores.
A este estudio se suma otro. Según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), la población económicamente activa (PEA) a 2012 ascendió a 661,000 personas y de este total el 95% tenía una ocupación, mientras que el 5% de la misma estaba desempleada.
Migración
La mayor demanda de mano de obra ha generado una migración moderada de trabajadores procedente de otras regiones, incluyendo a Lima, como operarios de equipos mecánicos y mecánicos de mantenimiento de equipos industriales, para actividades como la minería, construcción y manufactura.
De la capital han migrado especialmente ejecutivos, funcionarios y profesionales especializados de diversos campos como la minería, geología, gestión de seguridad industrial y minera, metalurgia, informática, finanzas, negocio de retail y otros.
Estos factores han consolidado el crecimiento de Arequipa. En esta región convergen limeños, puneños, cusqueños, moqueguanos, ayacuchanos y de otras regiones que llegaron a este lugar seducidos por la oferta de empleo, la calidez de la población local y su incomparable comida; con su capacidad profesional y esfuerzo, ellos aportan al desarrollo de la región.
Hay problemas de seguridad, informalidad y transporte caótico, como lo sufren otras grandes ciudades del país, pero ese es también un desafío por vencer que se debe enfrentar en un esfuerzo conjunto. Arequipa y los arequipeños de nacimiento y de corazón como André se lo merecen.
Retos y oportunidades
El jefe del BCR-Arequipa consideró que es importante fortalecer este crecimiento y lograr un desarrollo sostenible con mejores condiciones para una mayor inclusión social y competitividad de la región. “Si bien los indicadores sociales de Arequipa son mejores respecto al promedio nacional, aún no son óptimos.” Un importante aporte al futuro crecimiento económico de Arequipa, que influirá en la reducción de las tasas de pobreza y desempleo, será la ejecución de obras de infraestructura que demandarán una gran inversión.
Uno de estos es Majes Siguas II, cuyas obras ya se iniciaron oficialmente y su desarrollo a largo plazo será muy importante. A este proyecto se suma la ejecución de obras de infraestructura terrestre, aérea y marítima.
La contribución de Majes Siguas I al PBI regional del sector agrícola es de 12.2%.
Sector agrícola
El sector agrícola aporta también al crecimiento del PBI y genera gran cantidad de empleo. Los principales cultivos de Arequipa son el arroz, cebolla, ajo, maíz amiláceo, frijol y papa, entre los transitorios, y pastos cultivados, olivo, vid, entre los permanentes.
Poco a poco han tomado mayor importancia, por la demanda extranjera, los cultivos agroindustriales.