Plantean racionalizar y eliminar exoneraciones de impuestos en el país
Medidas aumentarían presión tributaria de 14.8% a 20.1%
Los ingresos tributarios en el Perú podrían llegar a los 24 mil 990 millones de nuevos soles con base en las cifras del Producto Bruto Interno (PBI) a 2011, de darse algunas condiciones básicas para lograr estos resultados, afirmó el director ejecutivo del Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (IEDEP) de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), César Peñaranda.
"Ello será posible con una racionalización y posterior eliminación de las exoneraciones tributarias, las cuales representan el 1.2% del PBI; así como con la erradicación de la evasión del Impuesto General a las Ventas (3.7% del PBI) y una mayor lucha contra el contrabando en el país (0.4% del PBI)", precisó.
El ejecutivo sostuvo que este potencial de recursos para el fisco podría adicionar 5.3 puntos porcentuales del PBI a la presión tributaria.
Para Peñaranda, el Perú necesita una reforma tributaria integral basada en un incremento de la recaudación y la ampliación de la base de contribuyentes.
"Recordemos que el total de contribuyentes inscritos con Registro Único de Contribuyentes (RUC) es de cinco millones 116 mil 811 personas, de las cuales el 99.7% está representado por medianos y pequeños participantes; mientras que el 0.3% (14 mil 402 empresas) está integrado por los principales pagadores", aseveró.
Asimismo, el especialista consideró que es importante corregir el sesgo regresivo, toda vez que nuestro sistema impositivo está representado mayormente por los impuestos indirectos (64%), los cuales se concentran en lo que se recauda por concepto de IGV (49%).
Agregó que a diferencia de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), donde el 70% de la recaudación por Impuesto a la Renta (IR) lo representan personas naturales y el 30% restante son personas jurídicas, en el Perú la situación es inversa, originando que el 32% de los aportantes por IR sean personas naturales y el 68% restante sean personas jurídicas.
Peñaranda consideró que es necesario modernizar y simplificar la administración tributaria.
En este sentido, sostuvo que la política tributaria tiene que basarse en el IR, el cual debe constituirse en el impuesto más relevante, por lo que han de revisarse sus tasas, descuentos y progresividad a partir de un estudio específico; el IGV, cuya tasa tiene que reducirse progresivamente analizando su impacto en la recaudación potencial, y el Impuesto Selectivo al Consumo (ISC), ya que su tasa y aplicación debe responder estrictamente al propósito de corregir externalidades negativas en la actividad económica.
Por otro lado, el ejecutivo afirmó que la evasión del IGV le cuesta al Perú 3.7% de su PBI (13 mil 712 millones de nuevos soles a 2008).
Asimismo, reveló que el contrabando le costó a nuestro país 480 millones de dólares en 2009, siendo los sectores Agroindustria y Comercio los más afectados.
1 El sistema tributario peruano mantiene un sesgo hacia los impuestos indirectos (64%), concentrado en lo recaudado por concepto de IGV (49%).
2 De los ingresos, el 49% le corresponde al IGV; el 36% al IR; el 6% a la recaudación del ISC; el 3% a los aranceles y el 6% restante a impuestos de otro tipo.